Espero que algún día nos volvamos a encontrar… que me cuentes como estas, si no es tan malo aquel lugar… espero que algún día podamos re entablar aquello que quedo en la mitad.
Puedo soñarte, pero no puedo abrazarte, esta ausencia se incrusto en mi alma y me acompaña.
No te imaginas la falta que me haces, esa necesitad de escucharte… te me escapas al despertar y en la noche eres errante… después de meses las palabras recién han comenzado brotar y aunque mi/tus caminos ya no se conectan, siempre de alguna forma estas presente.
Me consuela el saber que me esperaste, que me amaste tal cual soy, sin pedirme perfección… me alegra que hayas sido tú quien me mostro el mundo y que durante años me acompañaras tomada de tu mano… te agradezco que hasta el ultimo momento no me hayas dejado de reconocer.
Después de meses en una pausa constante he podido descubrir otra forma de sentir, otra forma de doler. .. he aprendido a cargar con esa falta que constantemente me haces, y es que no hay nadie que logre lo que tú hacías, devolverme en segundos la alegría, devolverme en segundos esas ganas por esta vida.
Me consuela saber que tu dolor ya pasó.
Ya no malgasto días preguntándome el por que de tu partida, el dolor que desato es la prueba ferviente de tu paso por esta/mi vida. Ya no hay gritos al viento ni suplicas en desconcierto, me descongelo y aniquilo esos momentos, te guardo en mi memoria como el más bello de los recuerdos y callo con recelo las promesas que esparcimos en el tiempo.
Puedo soñarte, pero no puedo abrazarte, esta ausencia se incrusto en mi alma y me acompaña.
No te imaginas la falta que me haces, esa necesitad de escucharte… te me escapas al despertar y en la noche eres errante… después de meses las palabras recién han comenzado brotar y aunque mi/tus caminos ya no se conectan, siempre de alguna forma estas presente.
Me consuela el saber que me esperaste, que me amaste tal cual soy, sin pedirme perfección… me alegra que hayas sido tú quien me mostro el mundo y que durante años me acompañaras tomada de tu mano… te agradezco que hasta el ultimo momento no me hayas dejado de reconocer.
Después de meses en una pausa constante he podido descubrir otra forma de sentir, otra forma de doler. .. he aprendido a cargar con esa falta que constantemente me haces, y es que no hay nadie que logre lo que tú hacías, devolverme en segundos la alegría, devolverme en segundos esas ganas por esta vida.
Me consuela saber que tu dolor ya pasó.
Ya no malgasto días preguntándome el por que de tu partida, el dolor que desato es la prueba ferviente de tu paso por esta/mi vida. Ya no hay gritos al viento ni suplicas en desconcierto, me descongelo y aniquilo esos momentos, te guardo en mi memoria como el más bello de los recuerdos y callo con recelo las promesas que esparcimos en el tiempo.